Pedimos al gobierno que no se olvide de los socios

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Miguel García y Jesús Ramírez son dos de los socios de ORCASAL, sociedad que nació de la extinta empresa Frantomps. Cuando la crisis acabó con la misma, el Ayuntamiento de Valsequillo, actual máximo accionista, de acuerdo con los trabajadores, se hicieron con su propiedad. Ambos propietarios muestran su disconformidad con la posible venta de los terrenos, así como el precio por el que ha sido tasado su propiedad

«Yo no quiero el dinero, yo quiero que nos den lo que es nuestro», afirma Miguel García. «Quieren contar con nosotros -el gobierno-, pero nos siguen engañando y haciendo lo que les da la gana». Por su parte, Jesús Ramírez, confiesa que el precio al que les han ofrecido vender sus acciones, sesenta euros, «es imposible», porque, recordó, «quienes ya compraron acciones en su momento lo hicieron a noventa euros. Nosotros queremos el trozo de tierra, no nos la dan. El Ayuntamiento parece más interesado en vendérsela a otras personas». La sospecha de ambos propietarios es que los terrenos que les corresponde, sean vendidos a otros propietarios con mayor número de acciones en la sociedad.

 

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